El emailing es uno de los métodos más efectivos para comprometer a una audiencia, pero la competencia para captar la atención del destinatario es más feroz que nunca. Para destacar en las bandejas de entrada llenas, necesitas dominar el arte de las palabras y utilizar desencadenantes emocionales que capten la atención, despierten la curiosidad y estimulen las conversiones.

En este artículo, te explicamos el impacto de estas palabras mágicas y cómo integrarlas en tu estrategia de emailing.

¿Qué es un desencadenante emocional?

Un desencadenante emocional es un estímulo, ya sea visual, auditivo, lingüístico u otro, capaz de despertar un comportamiento o una reacción emocional en una persona. Los desencadenantes a menudo están asociados con experiencias pasadas, recuerdos, creencias o valores personales.

En el contexto del marketing y la comunicación, los desencadenantes emocionales se utilizan para evocar emociones específicas en el público con el fin de crear conexiones emocionales con una marca, un producto o un mensaje. Estos desencadenantes pueden variar según el objetivo deseado, ya sea para despertar la curiosidad, crear un sentido de urgencia, evocar emociones positivas o negativas, o establecer una conexión personal con el destinatario.

El poder de las emociones

Las emociones juegan un papel central en el proceso de toma de decisiones humanas. Integrar palabras desencadenantes que evoquen emociones positivas como «alegría», «felicidad» o «éxito», o emociones negativas como «miedo», «pérdida» o «arrepentimiento», provocará algo en los destinatarios. Por lo tanto, la idea es encontrar las palabras correctas para emplear con el fin de suscitar la emoción deseada.

Un dato interesante, una encuesta realizada por Jonah Berger, profesor de marketing en la Wharton School de la Universidad de Pensilvania y autor, demostró que las emociones fuertes incitan a las personas a compartir contenido con otros. Ya sean emociones positivas o negativas, permiten aumentar la transmisión del mensaje.

En el emailing, el uso juicioso de desencadenantes emocionales puede mejorar en gran medida la eficacia de tus campañas al despertar la atención, crear compromiso y fomentar las conversiones.

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¿Qué desencadenantes emocionales usar?

¿Te preguntas qué emociones usar? Comencemos con la base de las ocho emociones primarias identificadas por el psicólogo estadounidense Robert Plutchik en 1980 con su rueda de emociones: alegría, miedo, disgusto, ira, tristeza, sorpresa, confianza y anticipación. Ahí tienes un buen punto de partida.

Aquí te presentamos algunos desencadenantes emocionales efectivos para integrar en tus emails:

La curiosidad, la sorpresa y la anticipación

  • Nuevo
  • Descubra
  • Revelación
  • Secreto
  • Exclusivo
  • Envidia
  • Entusiasmo
  • Olvidado
  • Inspiración
  • Deseo
  • Misterio
  • Sorprendente
  • Asombroso
  • Espectacular
  • Notable
  • Fascinante

Las palabras que despiertan curiosidad, sorpresa o anticipación incitan al destinatario a abrir su email para saciar su sed de conocimiento. Despiertan un interés inmediato, estimulan la interacción y aumentan significativamente las posibilidades de que el mensaje sea leído.

La urgencia y la acción

  • Gratis
  • Exclusivo
  • Ahora
  • Última oportunidad
  • Oferta limitada
  • Únicamente
  • Solo
  • No esperes más
  • Rápido

La incitación a la acción es esencial en cualquier estrategia de emailing exitosa. Utilizar el estilo de palabras mencionadas anteriormente crea un sentido de urgencia que motiva al destinatario a actuar de inmediato.

Integra estas palabras desencadenantes con moderación para evitar parecer demasiado insistente, pero lo suficiente para provocar la acción.

Las emociones positivas

  • Alegría
  • Felicidad
  • Éxito
  • Satisfacción

Las emociones positivas en los mensajes de emailing ayudan a captar la atención, fomentan el compromiso y fortalecen la memorabilidad. Al crear una conexión emocional con el destinatario, contribuyen a una imagen de marca positiva, influyen en la compra y reducen la resistencia a la venta.

Las emociones negativas

  • Miedo
  • Pérdida
  • Arrepentimiento
  • Abuso
  • Ansiedad
  • Agotamiento
  • Fracaso
  • Pánico
  • Vergüenza
  • Aburrido

En cuanto a las emociones negativas, pueden ser útiles para crear un sentido de urgencia, subrayar problemas a resolver o incitar a evitar riesgos potenciales. Atención, utiliza estas palabras con moderación, ya que un exceso de emociones negativas puede tener un impacto contrario al generar una reacción desfavorable.

La confianza y la fiabilidad

  • Probado
  • Seguridad
  • Garantizado
  • Sin riesgo
  • Infalible
  • Confiable
  • Respaldado por la investigación
  • Digno de confianza

Estos desencadenantes sirven para establecer una relación de confianza con los destinatarios. Refuerzan la credibilidad de la marca, reducen la incertidumbre percibida y fomentan la toma de acción.

Los otros desencadenantes

Otras palabras también actúan como desencadenantes emocionales en los destinatarios, por ejemplo, las palabras de personalización («tú», «tu»), las palabras de recompensa («felicitaciones», «recompensa») y las palabras que apelan a los sentidos («probar», «ver», «oír», «tocar», «sentir»).

Los desencadenantes emocionales son una herramienta poderosa en el arsenal de una estrategia de emailing exitosa. Sin embargo, es importante adaptarlos a tu audiencia, a tu producto o servicio, y mantener una autenticidad en tu comunicación. Evita la sobreutilización de los desencadenantes y las palabras prohibidas a evitar en tu newsletter y asegúrate de que estén en armonía con la imagen de tu marca para crear una experiencia coherente y positiva para tus destinatarios.

Nicolas
Author

Aporto mi experiencia en marketing digital a través de mis artículos. Mi objetivo es ayudar a los profesionales a mejorar su estrategia de marketing en línea compartiendo trucos prácticos y consejos relevantes. Mis artículos están redactados de manera clara, precisa y fácil de seguir, tanto si eres principiante como experto en la materia.